El pasado 27 de octubre se cumplieron ocho años de la detención del ex preso político yaqui Fidencio Aldama. Este año marcamos la fecha en circunstancias diferentes, felices por su recién lograda libertad, inseguros de lo que pueda deparar el futuro.
Fidencio fue liberado de la prisión de Ciudad Obregón el 14 de julio de 2023 durante diálogos entre el Gobierno Federal y la Tribu Yaqui. La libertad de Fidencio fue la primera de una larga lista de demandas hechas por las autoridades tradicionales de Loma de Bácum en relación con el Plan de Justicia Yaqui que impulsa el Gobierno Federal. Haciendo clara la arbitrariedad de la detención de Fidencio, y la capacidad del gobierno de hacer lo que le convenga en ese momento, Fidencio fue liberado con un chasquido de dedos, bajo términos legales inciertos que aún no han sido aclarados. Hasta ahora no ha tenido que presentarse en prisión por las tardes ni durante los fines de semana. Sigue en libertad y en buen ánimo. Agradecemos a las autoridades de Loma de Bácum por posicionar la libertad de Fidencio como una demanda central de la Tribu Yaqui.
Agradecemos también la continua resistencia del pueblo Yaqui, en defensa de sus territorios y formas de ser, frente al mundo saqueado, esquilmado e invivible que trae el capitalismo. Creemos lo suficiente en la autonomía y autodeterminación indígena como para respetar las formas de organización y lucha que las autoridades de la tribu han elegido en este caso particular, aunque no compartamos el mismo entusiasmo por las tácticas.
Queremos agradecer al colectivo legal, Los Otros Abogadoz, y particularmente al abogado y compañero, Roberto Miguel López, por años de dedicación al caso de Fidencio; por luchar fervientemente contra la represión estatal y la prisión política en varios diferentes casos legales, a menudo en medio de las circunstancias más adversas. También queremos agradecer a todas las personas que a lo largo y ancho del llamado México y alrededor del mundo, mostraron su solidaridad en sus múltiples manifestaciones: organizando eventos, haciendo arte, mantas, gráficas, pintando las calles con grafiti, escribiendo cartas, marchando en protestas, dando cobertura en medios independientes, haciendo radio solidaria, donando fondos, etc. Todo eso ha dejado claro una vez más que la solidaridad es una de nuestras armas más potentes. Por ahora, terminamos este capítulo como grupo de solidaridad activa. Sin embargo, les invitamos a todos a mantenerse atentos al caso de Fidencio Aldama, y a las luchas del pueblo Yaqui en general.
¡Libertad incondicional para Fidencio Aldama!
¡Libertad para todxs lxs presxs y perseguidxs!
¡Autonomía para los pueblos indígenas!
¡Solidaridad con Miguel Peralta!
Grupo de Apoyo a Fidencio Aldama